El técnico uruguayo Paulo Pezzolano, que fue destituido como conductor del Real Valladolid de España, descartó la posibilidad de dirigir a Nacional pese a ser nombrado entre los candidatos a asumir el cargo en sustitución de Martín Lasarte.
«Hace dos semanas que salimos de Valladolid y me sorprendió y me generó orgullo todo lo que se movió. Seis o siete equipos fuertes de Brasil nos llamaron, algún equipo de México, uno de Championship (Segunda de Inglaterra) y otro de Francia. Ahora hay que saber qué elegir», expresó Pezzolano en el programa 100% Deportes de Sport 890.
Cuando se le preguntó si había sido contactado por alguien de Nacional, Pezzolano respondió: «No, no, conmigo no habló nadie de Nacional. Yo soy perfil muy bajo. Me llamaron muchos equipos, no me gusta vender nada de eso, pero en este caso no me llamó nadie. Mi posición es continuar en el exterior, eso está claro».
Posteriormente el entrenador habló de su paso por el fútbol español: «Yo estaba en la liga española que es la segunda mejor de Europa después de la Premier. ¿Qué te da? Entre otras cosas que te enfrentás a los mejores entrenadores, estás analizando cómo enfrentarte con Simeone, Xavi, Ancelotti, y eso es un crecimiento constante. Es un partido de ajedrez en España. El crecimiento es espectacular y quiero seguir aprendiendo».
Pezzolano agregó: «Lo primero que intentamos es un tipo de modelo de juego, pero cuando estás en un equipo de los inferiores de la liga tenés que saber que no lo vas a poder llevar adelante en muchos partidos. ¿Por qué? Porque hay equipos que no te van a dejar tener la pelota, entonces vas a tener que apelar a transiciones rápidas y de eso aprendí mucho en el Valladolid».
El entrenador expresó que, otra de las cosas que aprendió en Europa es a gestionar: «La gestión es el 99% del entrenador. Vos podés jugar de una manera, de otra, pero vos tenés que saber gestionar porque llegás a un club y tenés que manejar un grupo de 90 personas, los funcionarios, tú cuerpo técnico, la cabeza de los jugadores, el ego. Eso es fundamental en un entrenador. Después todos tenemos nuestra forma de jugar, pero si no tenés la gestión todo lo otro no funciona».
Y concluyó hablando de su salida de Valladolid y su relación con el brasileño Ronaldo, dueño del equipo: «Ronaldo no quería sacarnos ni que nos fueramos. Fue algo que veníamos meditando y hablando. ¿Para qué? Para buscar una solución para la permanencia del Valladolid. A ellos les gusta mucho cómo trabajamos, estábamos muy espalda con espalda con todos, pero es fundamental en cierto momento darle aire al proyecto. Si fuera por ellos o por mi estaríamos cinco años juntos, pero había mucha interferencia en el club».